"Ley Tokman" genera consensos Marcelo Tokman Ramos El respaldo unánime que dieron los senadores de la comisión de minería y energía del Senado a la iniciativa legal que la prensa ha denominado como "Ley Tokman" nos demuestra que estamos trabajando en la senda correcta. Asimismo, ha hecho evidente la necesidad y urgencia, planteada por el Gobierno y compartida por todos los sectores, de regular los vacíos legales existentes, sobre todo ante un escenario de estrechez como el que estamos viviendo, que podrían terminar por afectar la prestación de un servicio tan importante como la energía eléctrica. En efecto, todas las empresas del sector han concordado que nuestra legislación actual no se hace cargo de preservar la seguridad en el suministro y la suficiencia del sistema eléctrico ante las hipótesis de quiebra de una empresa transmisora, distribuidora o generadora o ante el término por sentencia firme de un contrato de suministro que tenga por objeto abastecer a clientes regulados. Pese al acuerdo unánime sobre la necesidad de legislar, han surgido diversas críticas en cuanto a que el proyecto sería un desincentivo a la inversión. Al respecto, quisiera señalar que en ningún caso el proyecto cambia la concepción económica del Gobierno en torno a incentivar las inversiones en generación eléctrica. En este sentido, el fortalecimiento de la legislación, por la vía de eliminar las incertidumbres regulatorias, es siempre una señal positiva para el mercado y brinda más confianza a los inversionistas. A la autoridad le cabe una responsabilidad en estos temas, y no enfrentarla es lo que constituiría una mala señal. El proyecto, tal y como ingresó al Congreso, no es una mala señal para la inversión. Frente a esos cuestionamientos recalco que durante la discusión de la iniciativa legal, tanto el Ejecutivo como los parlamentarios, incorporamos al proyecto modificaciones que eliminaron cualquier posibilidad de que éste pueda ser visto como un desincentivo a la inversión. En efecto, entre otras medidas, se estableció que las unidades generadoras que deberán asumir el suministro de la distribuidora sin contrato serán sólo aquellas que se encuentren hoy conectadas al sistema, de modo de no afectar la instalación de nuevas unidades y, a instancias de los parlamentarios, se les reconoció un crédito a los generadores que suministren el contrato de la empresa en quiebra. Por ello me extrañan las críticas que aún se siguen formulando en este sentido y que pretenden soluciones orientadas a traspasar los costos a los clientes regulados. Ni el Ejecutivo ni los senadores estamos dispuestos a validar soluciones de este tipo. Tanto el Ejecutivo como los parlamentarios han hecho un trabajo serio en esta materia, que ha considerado las opiniones y observaciones de los diversos actores del sector eléctrico. Durante toda la tramitación del proyecto, hemos realizado un intenso trabajo conjunto con los parlamentarios y destacados consultores del sector, tales como María de la Luz Domper y Renato Agurto, lo que nos ha permitido generar un texto ampliamente consensuado. De esta manera, estamos muy satisfechos con el texto aprobado por la comisión, pues en él se conservan intactos los objetivos iniciales de la iniciativa: el resguardo a la seguridad y suficiencia de los sistemas eléctricos y el suministro de energía a clientes regulados, sin traspasarles a éstos costos adicionales. |
Posteado por El Mercurio a las Septiembre 1, 2007 |
Rodrigo González Fernández
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